La noche del 5 de noviembre de 2025, el Palacio Real de España se iluminó con la presencia del sultán de Omán, Haitham bin Tariq al Said, quien fue recibido por los Reyes de España en una cena de gala. Este evento marcó el regreso de las visitas de Estado tras un parón de dos años, y la Reina Letizia deslumbró con su elección de vestuario y joyas, reafirmando su estatus como ícono de la moda y la elegancia real.
La Reina Letizia, en solitario, brilló en la cena, no solo por su porte y elegancia, sino también por la tiara que eligió para la ocasión. La tiara rusa, una impresionante pieza de filigrana de diamantes, platino y perlas, ha sido parte de la historia de la familia real española desde hace más de un siglo. Esta tiara fue originalmente propiedad de la reina María Cristina, viuda de Alfonso XII, y ha pasado por varias generaciones, siendo un símbolo de la continuidad y el legado de la monarquía española.
### La Tiara Rusa: Un Símbolo de Historia y Elegancia
La tiara rusa es una de las joyas más emblemáticas de la corona española. Su historia se remonta a la reina María Cristina, quien la recibió como regalo. Posteriormente, fue heredada por su hijo, Alfonso XIII, quien se la regaló a su nuera, María de las Mercedes, condesa de Barcelona. A diferencia de otras tiaras que pertenecieron a la reina Victoria Eugenia, la tiara rusa siempre ha sido propiedad de la condesa de Barcelona. Esta joya ha sido prestada a varias mujeres de la familia real, incluyendo a la infanta Pilar y a su nieta, Simoneta Gómez-Acebo, quienes la lucieron en sus bodas.
Tras el fallecimiento de la condesa de Barcelona en el año 2000, el rey Juan Carlos llegó a un acuerdo con sus hermanas, Pilar y Margarita, y se quedó con la tiara rusa, que posteriormente regaló a la reina Sofía. Desde entonces, esta joya ha sido utilizada en diversas ocasiones por la reina Sofía, y ahora, la reina Letizia ha continuado con esta tradición, llevándola en un evento tan significativo como la cena de gala con el sultán de Omán.
La elección de la tiara rusa por parte de la Reina Letizia no solo resalta su gusto por la moda, sino también su respeto por la historia de la monarquía española. En un mundo donde las tendencias cambian rápidamente, la Reina ha sabido mantener un equilibrio entre la modernidad y la tradición, eligiendo piezas que cuentan historias y que son parte del patrimonio cultural de España.
### Un Vestido que Resalta la Elegancia
En la cena de gala, la Reina Letizia no solo deslumbró con su tiara, sino también con su vestido. Optó por un modelo de la firma The 2nd Skin, un diseño azul klein que se ajustaba perfectamente a su figura. Este vestido, que contaba con un cuello redondo, mangas abullonadas y una amplia cola, fue el mismo que utilizó durante la visita de Estado a los Países Bajos en abril de 2024. La elección de repetir un look en un evento tan importante demuestra la confianza de la Reina en su estilo y su capacidad para reinterpretar la moda.
Además, la Reina Letizia complementó su atuendo con pendientes de brillantes que aportaron un toque de sofisticación. Su cabello, suelto y ondulado, enmarcaba su rostro, permitiendo que la tiara y el vestido fueran los protagonistas de la noche. La elección de un look austero pero impactante es una característica distintiva de la Reina, quien siempre busca resaltar su elegancia sin caer en excesos.
La cena de gala fue un evento que no solo celebró la relación entre España y Omán, sino que también fue una oportunidad para que la Reina Letizia mostrara su estilo personal y su conexión con la historia de la monarquía. La combinación de la tiara rusa y el vestido azul klein fue un recordatorio de que la moda puede ser una forma de expresión cultural y un medio para honrar el pasado.
La jornada comenzó con la recepción del sultán de Omán en el patio de la Armería, donde los Reyes le dieron la bienvenida con honores. A pesar del frío de la mañana, tanto el Rey como la Reina lucieron abrigos elegantes. La Reina Letizia eligió un abrigo negro tipo batín que dejaba entrever un vestido de la firma Pertegaz, un modelo gris perla con aplicaciones florales que complementaba su estilo.
El sultán de Omán, quien viajó a España acompañado de su hermano y viceprimer ministro, Shihab bin Tariq, asistió a la cena sin su esposa, Ahad bint Abdullah. A pesar de que la esposa del sultán tiene un papel público en Omán, no suele acompañar a su marido en sus viajes al extranjero. Este hecho resalta una diferencia cultural en comparación con otras monarquías del Golfo Pérsico, donde es común que las esposas de los líderes acompañen a sus maridos en eventos internacionales.
La Reina Letizia, durante la cena, también lució un collar con la condecoración que el sultán de Omán le otorgó en reconocimiento a su papel como representante de España. Este gesto simboliza la importancia de las relaciones diplomáticas y el respeto mutuo entre ambas naciones.
La cena de gala no solo fue un evento social, sino también una oportunidad para fortalecer lazos entre España y Omán, y la presencia de la Reina Letizia, con su estilo y elegancia, fue un reflejo del compromiso de la monarquía española con la diplomacia y la cultura. La Reina ha demostrado ser una figura clave en la modernización de la imagen de la monarquía, combinando tradición y contemporaneidad en cada uno de sus apariciones públicas.
