El panorama de la defensa y el espacio en Europa está experimentando cambios significativos, impulsados por la colaboración entre grandes empresas tecnológicas y de defensa. En este contexto, Indra, una de las principales compañías de tecnología y defensa en España, ha abierto la puerta a una posible alianza con Telefónica para desarrollar radios tácticas militares. Esta colaboración podría marcar un hito en la modernización de las comunicaciones del Ejército español, especialmente tras la reciente adjudicación de contratos públicos a un consorcio que incluye a Telefónica.
### Alianzas Estratégicas en el Sector Militar
El consejero delegado de Indra, José Vicente de los Mozos, ha expresado su interés en colaborar con Telefónica en el marco de un contrato que ha recibido un préstamo significativo del Gobierno español. Este préstamo de 768 millones de euros, con un interés del 0%, está destinado a la prefinanciación de un programa de radios tácticas militares. Durante un desayuno informativo, De los Mozos destacó que la colaboración con Telefónica es posible si ambos encuentran intereses comunes. Esta declaración subraya la importancia de las alianzas estratégicas en el sector de defensa, donde la complejidad de los contratos a menudo requiere la colaboración entre diferentes empresas.
La adjudicación de contratos para el suministro de radios tácticas ha sido un tema candente, especialmente con la participación de empresas como Aicox y Telefónica, que han trabajado en conjunto para cumplir con las especificaciones de cifrado y seguridad impuestas por el Gobierno. Sin embargo, la inclusión de la firma israelí Elbit Systems en el acuerdo ha complicado la situación, dado el veto del Gobierno español a las armas y tecnologías de defensa israelíes. Esto ha llevado a Indra a buscar nuevas asociaciones, como la reciente colaboración con la empresa finlandesa Bittium, para competir en este ámbito.
Telefónica, por su parte, ha manifestado su intención de expandir su negocio en el sector de defensa. La empresa está interesada en desarrollar redes privadas 5G para operaciones militares, lo que incluye la implementación de tecnologías avanzadas para mejorar las comunicaciones entre unidades navales y drones. Este enfoque en la ciberseguridad y las redes 5G refleja una tendencia creciente en la industria de defensa, donde la tecnología juega un papel crucial en la eficacia operativa.
### El Futuro del Sector Espacial Europeo
Además de su enfoque en la defensa, Indra también está observando el desarrollo del nuevo gigante espacial europeo, que se formará a partir de la fusión de los negocios de Thales, Airbus y Leonardo. Aunque De los Mozos ha descartado la posibilidad de que Indra se una a este consorcio en el corto plazo, ha señalado que la empresa tiene capacidades en el sector espacial que podrían ser valiosas en el futuro. Indra ya cuenta con una división dedicada a la vigilancia espacial, y su experiencia podría ser un activo en la nueva estructura europea.
El proyecto, conocido como Bromo, se centrará en la parte ‘upstream’ del espacio, donde se desarrollan tecnologías y sistemas para la exploración y utilización del espacio. Indra, con su experiencia en radios de vigilancia espacial, podría convertirse en un proveedor clave para este nuevo consorcio en el futuro. Además, la creación de filiales en diferentes países europeos, incluida España, refleja un enfoque en la soberanía nacional y la seguridad en el ámbito espacial.
En este contexto, Indra está en proceso de adquirir el 89,68% de Hispasat, una operación que está pendiente de la aprobación de las autoridades reguladoras. Esta adquisición no solo fortalecerá la posición de Indra en el sector espacial, sino que también le permitirá jugar un papel más importante en la infraestructura de comunicaciones satelitales en Europa.
La convergencia de intereses entre Indra y Telefónica, junto con la evolución del sector espacial europeo, sugiere que estamos en la cúspide de una nueva era en la defensa y la tecnología espacial. Las empresas están cada vez más interconectadas, y las alianzas estratégicas serán fundamentales para abordar los desafíos y aprovechar las oportunidades que surgen en estos sectores dinámicos. La colaboración entre estas dos gigantes de la tecnología y la defensa podría ser un paso crucial hacia un futuro más seguro y tecnológicamente avanzado para España y Europa.
