El Corte Inglés se ha posicionado como un referente en la lucha contra el desperdicio alimentario, participando activamente en la 8ª Semana contra el Desperdicio Alimentario, una iniciativa que se celebra del 22 al 29 de septiembre. Esta campaña, promovida por la asociación de fabricantes y distribuidores, coincide con el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos, que se conmemora el 29 de septiembre. El objetivo principal de esta iniciativa es sensibilizar a la sociedad sobre la importancia del aprovechamiento de los alimentos y fomentar hábitos de consumo responsables.
Durante esta semana, El Corte Inglés ha implementado una serie de acciones informativas en sus tiendas, dirigidas tanto a clientes como a empleados. La campaña incluye el uso de cartelería, megafonía, intranet, web, aplicaciones móviles y redes sociales para maximizar su alcance. Esta estrategia busca no solo informar, sino también educar sobre la importancia de reducir el desperdicio y adoptar prácticas más sostenibles en el día a día.
### Estrategias para la Prevención del Desperdicio
A lo largo de los años, El Corte Inglés ha desarrollado un modelo de gestión que prioriza la prevención del desperdicio alimentario. Esto se logra a través de una planificación cuidadosa y la mejora de los procesos logísticos, lo que permite una gestión de stock más eficiente. Un aspecto crucial de este modelo es el mantenimiento de la cadena de frío y la adecuada conservación de los productos, lo que garantiza que los alimentos se mantengan en condiciones óptimas hasta su venta.
Además, la empresa ha implementado medidas para la redistribución de excedentes. Esto incluye la donación de alimentos que, aunque no son aptos para la venta, son perfectamente consumibles. En el último ejercicio, El Corte Inglés ha donado más de 5,2 millones de kilos de alimentos a entidades sociales que apoyan a colectivos vulnerables. Esta acción no solo ayuda a reducir el desperdicio, sino que también contribuye a la lucha contra la pobreza alimentaria en la sociedad.
Otro aspecto importante de la estrategia de sostenibilidad de El Corte Inglés es la gestión de los excedentes no aptos para el consumo humano. Estos alimentos son redirigidos hacia la alimentación animal, beneficiando a zoológicos y granjas de ganado autóctono. De esta manera, la empresa no solo minimiza el impacto ambiental de sus operaciones, sino que también apoya a la industria agrícola y ganadera.
### Compromiso con la Economía Circular
El compromiso de El Corte Inglés con la sostenibilidad va más allá de la simple reducción del desperdicio. La empresa está adoptando un enfoque de economía circular, que busca maximizar el valor de los recursos y minimizar el impacto ambiental. Esto incluye la utilización de alimentos no aptos para el consumo en la producción de biocombustibles, contribuyendo así a un modelo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Además, El Corte Inglés se adapta a la normativa vigente en materia de gestión de excedentes, implementando planes específicos que contemplan la jerarquía de gestión de excedentes y convenios de donación. También se están llevando a cabo medidas en el sector de la hostelería, como la promoción de envases reutilizables, que ayudan a reducir el uso de plásticos y otros materiales contaminantes.
La empresa reafirma su compromiso con la responsabilidad social y la sostenibilidad, contribuyendo activamente a la reducción del desperdicio alimentario y promoviendo una cultura de consumo consciente. A través de estas iniciativas, El Corte Inglés no solo busca mejorar su imagen corporativa, sino que también se posiciona como un líder en la transformación hacia un modelo de negocio más sostenible.
En un mundo donde el desperdicio alimentario es un problema creciente, la labor de empresas como El Corte Inglés es fundamental. Su enfoque proactivo y sus múltiples iniciativas demuestran que es posible combinar la rentabilidad empresarial con la responsabilidad social y ambiental. La concienciación sobre el aprovechamiento de los alimentos y la reducción del desperdicio son pasos cruciales hacia un futuro más sostenible para todos.
