La transición hacia una economía más sostenible es un tema que ha cobrado gran relevancia en los últimos años, especialmente en el sector de la aviación. En este contexto, el proyecto Compostilla Green se erige como un referente en la producción de combustibles sostenibles para la aviación, conocido como eSAF (sustainable aviation fuel). Este ambicioso proyecto, impulsado por RIC Energy, ha sido seleccionado como el único beneficiario de la convocatoria de ayudas a la creación de grandes valles o clústeres de hidrógeno renovable, lo que subraya su importancia en la lucha contra el cambio climático y en la descarbonización del sector aeronáutico.
### Un Proyecto Innovador en el Corazón de León
Compostilla Green se ubicará en el Polígono Industrial de El Bayo, en Cubillos del Sil, León. Este proyecto no solo representa una inversión significativa de más de 700 millones de euros, sino que también se prevé que tenga un impacto socioeconómico notable en la comarca del Bierzo y en toda Castilla y León. La planta, que comenzará su construcción a inicios de 2028 y se espera que esté operativa antes de 2030, tendrá la capacidad de producir hasta 60.000 toneladas anuales de queroseno verde. Este combustible se generará a partir de hidrógeno renovable y CO₂ biogénico capturado, lo que lo convierte en una opción viable y sostenible para la aviación.
La selección de Compostilla Green en esta convocatoria de ayudas, que cuenta con el respaldo del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) y está enmarcada dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea, es un testimonio del compromiso de España con la sostenibilidad y la innovación. José Luis Moya, CEO de RIC Energy, ha destacado que este proyecto no solo acelerará la transición energética en el país, sino que también posicionará a España como líder en la producción de combustibles sostenibles para la aviación en Europa.
### Implicaciones para el Sector Aeronáutico y la Economía Local
La implementación de Compostilla Green tendrá repercusiones significativas en el sector aeronáutico, especialmente en el contexto de la estrategia ReFuelEU de la Comisión Europea. Esta estrategia establece que, a partir de 2025, las aerolíneas deberán utilizar un porcentaje creciente de combustibles sostenibles, incluyendo una cuota específica de combustibles sintéticos a partir de 2030. Esto significa que la producción de eSAF en España no solo contribuirá a cumplir con los objetivos climáticos europeos, sino que también permitirá a las aerolíneas adaptarse a las nuevas regulaciones y demandas del mercado.
Además de su impacto ambiental, Compostilla Green generará un efecto positivo en la economía local. Durante su fase de construcción, se estima que se crearán más de 2.000 empleos directos, lo que representa una oportunidad significativa para la población de la comarca del Bierzo. Una vez que la planta esté en funcionamiento, se prevé que genere 240 empleos estables, además de más de 6.000 puestos de trabajo indirectos e inducidos. Esta creación de empleo no solo ayudará a dinamizar la economía local, sino que también fortalecerá el tejido industrial y tecnológico de la región.
El compromiso de RIC Energy con la sostenibilidad y la innovación se refleja en la ambición de Compostilla Green. Este proyecto no solo busca producir combustible sostenible, sino que también se alinea con los objetivos de descarbonización y transición energética que son fundamentales para el futuro del planeta. En un momento en que la presión para reducir las emisiones de carbono es más intensa que nunca, iniciativas como Compostilla Green son esenciales para garantizar un futuro más limpio y sostenible para las generaciones venideras.
La importancia de proyectos como Compostilla Green no puede subestimarse. A medida que el mundo avanza hacia una economía más verde, la producción de combustibles sostenibles para la aviación se convierte en una prioridad. Compostilla Green no solo representa un paso adelante en la producción de eSAF en España, sino que también establece un modelo a seguir para otros países que buscan hacer la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles. Con el apoyo de la Unión Europea y el compromiso de empresas como RIC Energy, el futuro del combustible sostenible para la aviación en España parece prometedor.